Esta semana nos ha faltado poner la entrada el viernes, así que la ponemos sin falta hoy sábado. En esta ocasión se me ha olvidó en que día vivía y ya cuando ayer me di cuenta ya la neurona para poner una entrada estaba apagada o fuera de cobertura. Ahora no está mucho mejor que digamos porque creo que con el calor se me está derritiendo o ha empezado a huir.

Esta semana ha sido un no parar de en el curro y fuera de él. Lo mejor de todo es que me he dado cuenta que tengo la sensación de que últimamente no me entero de nada, sobre todo en el trabajo. Dan por hecho que me cuentan cosas, pero la verdad es que nadie me dice nada. Además si no me lo cuentan quién me conozca sabe que no voy a preguntar, pues si me lo cuentan bien pero si no también. Y ¿qué es lo mejor de que no te cuenten las cosas? Que al no saber nada tampoco te puedes ofrecer para ayudar… es fácil si no te lo cuentan es que no cuentas para ellos por lo tanto no necesitan que les ayudes aunque es posible que nunca lo necesitasen. Y si alguien se pregunta ¿pero tu tienes algún problema con alguien? por mi parte no pero hacia mi, a saber … si no me lo dicen tampoco voy a preguntar.

Bueno dicho esto vamos a poner una frase, pero una que no haga trabajar mucho la neurona, que con este calor se nos achicharrará:

La amistad que acaba nunca había comenzado. – Siro

¿Qué opináis?  Cuando tienes un amigo de verdad da igual la distancia, el tiempo que llevéis sin hablar, los problemas que hayan surgido o las mejoras que tenga uno con respecto al otro, porque ahí estará siempre, aunque creas que no. Y lo mejor de todo es reciproco.

Espero vuestras opiniones en la parte de comentarios.

Un saludo,

Isasan.